Sueños dormidos


¿Cuántas veces has dejado que tu mirada persiga la caída del sol? 

     Esta tarde he podido escapar de mi ritmo habitual y me he permitido mirar al cielo, las nubes se mostraban de un rojo intenso, que me ha llevado a recordar otros atardeceres, unos románticos, otros tristes, otros risueños, otros enamorada...... que he podido disfrutar.

     He subido a la terraza y me he dejado seducir por la grandeza del cielo que se me mostraba inmenso, infinito y por unos instantes he podido sostener la maravilla de la vida, la grandeza de la tierra. 

     Unas lágrimas cálidas han brotado sin más, con la alegría de poder ser testigo por unos instantes de la propia vida. Me preguntaba cuántos atardeceres habrá visto mi alma y si los ángeles pueden ver la intensidad del rojo atardecer que me brindaba esta maravillosa tarde. 

     A través de mis ojos he podido transmitir más allá de mi ser, la alegría de ser parte de algo mucho más grande que jamás podré entender. 

      Feliz de poder sentir por unos momentos la paz que tanto busco fuera de mi y que se halla guardada en el fondo de mi corazón. ¿Me dará miedo desvelar todos mis secretos....?

Marta Tadeo
www.martatadeo.com

Foto: Marta Tadeo

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